Formación Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria

CURSO DE OFTALMOLOGÍA-OTORRINOLARINGOLOGÍA

2. OFTALMOLOGíA

2.3. FARMACOTERAPIA BÁSICA

2.3.1. Características de una formulación oftálmica.

Existen diversos tipos de formulaciones de uso habitual en oftalmología, las cuales, aunque son administradas por vías diferentes deben cumplir con al menos una serie de características comunes: esterilidad, isoosmolaridad, pH fisiológico, viscosidad y ausencia de partículas. Los controles de calidad realizados tras la elaboración de las formulaciones oftálmicas van a estar dirigidos a garantizar estos requerimientos.

2.3.1.1. ESTERILIDAD


Figura: modelo de filtro esterilizante

Consiste en la eliminación de todos los microorganismos de una preparación. Es una de las características más importantes en oftalmología ya que va a garantizar la ausencia de agentes contaminantes y, por tanto, disminuir la probabilidad de desarrollar infecciones oculares. Habitualmente se consigue por procedimientos físicos (esterilización por calor seco o vapor), mecánicos (filtración esterilizante) químicos (conservantes) y/o mediante su elaboración en cabinas de flujo laminar estéril.

Es un requisito exigido a todos los preparados comerciales en oftalmología, así como a las formulaciones magistrales elaboradas en los Servicios de Farmacia Hospitalaria.

2.3.1.2. ISOOSMOLARIDAD

La osmolaridad es la medida usada en medicina para expresar la concentración total de sustancias en disolución. El prefijo “iso” indica una concentración de partículas igual a la del plasma. La osmolaridad plasmática es equivalente a una solución de cloruro sódico al 0´9%, y a su vez, son iguales a la osmolaridad del fluido lagrimal.

2.3.1.3. pH FISIOLÓGICO

El pH es una medida de la acidez (carácter ácido) o alcalinidad (carácter básico) de una solución. El pH fisiológico del ojo es de alrededor de 7´4. Si bien el rango de pH tolerado oscila entre 6´6 y 7´8, se debe procurar optar por valores entre 7´2 y 7´6, aproximadamente, ya que de no estar entre estos valores se produce un cierto grado de malestar ocular (dolor, irritación y lagrimeo excesivo), disminuyendo, por consiguiente, el grado de absorción del fármaco.

2.3.1.4. AUSENCIA DE PARTÍCULAS


Figura: frascos para acondicionamiento de colirios

Toda formulación oftálmica debe estar exenta de partículas en suspensión exceptuando aquellos casos de suspensiones o pomadas en los cuales el tamaño e partícula debe estar dentro de unos límites bien definidos. Con este objetivo, durante su elaboración se utilizan filtros de partículas, se dispone de envases de acondicionamiento que aseguren la ausencia de partículas y se garantiza su elaboración en salas blancas con las condiciones ambientales controladas.

2.3.1.5. VISCOSIDAD

A mayor viscosidad de la preparación, mayor tiempo de permanencia del fármaco en el ojo. El objetivo es prolongar la acción del medicamento en el ojo y por consiguiente disminuir el número de aplicaciones diarias con colirios o pomadas. De esta manera se consigue simplificar el tratamiento y mejorar la adherencia.