Formación Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria

CURSO DE OFTALMOLOGÍA-OTORRINOLARINGOLOGÍA

2. OFTALMOLOGíA

2.3. FARMACOTERAPIA BÁSICA

2.3.2. Formulaciones oftálmicas y vías de administración

 

2.3.2.1. COLIRIOS Y POMADAS/GELES OFTÁLMICOS – VÍA CONJUNTIVAL

Un colirio es una disolución o suspensión estéril, acuosa u oleosa, de uno o más principios activos destinados a su instilación en el ojo. Pueden contener varios excipientes como conservantes, sustancias para ajustar la tonicidad o viscosidad de la preparación o sustancias para incrementar la solubilidad de principio activo.

Las preparaciones que se presentan en envases multidosis contienen un conservante antimicrobiano apropiado, exceptuando cuando la preparación tiene por sí misma suficientes propiedades antimicrobianas. Aun así, un colirio debe desecharse a las 4 semanas de su apertura en el medio ambulatorio. En algunos casos, el tiempo de validez una vez abierto puede ser incluso menor.


Imagen: colirio en monodosis.

Las pomadas y geles oftálmicos son preparaciones semisólidas destinadas a su aplicación en la conjuntiva. En general, son más viscosos que los colirios por lo que aumentan el tiempo de contacto con el ojo. Sin embargo, tienen la desventaja de que pueden producir visión borrosa.

2.3.2.2. JERINGAS PRECARGADAS – INYECCIÓN PERIOCULAR

Las inyecciones perioculares se administran principalmente alrededor del globo ocular, bien debajo de la conjuntiva del ojo (subconjuntival), alrededor del globo ocular (peribulbar) o detrás del globo ocular (retrobulbar). Esta vía es ideal para conseguir que se liberen al ojo altas concentraciones de fármaco. Habitualmente es muy utilizada en la cirugía de cataratas para la administración de anestésicos locales.

2.3.2.3. JERINGAS PRECARGADAS – INYECCIÓN INTRAOCULAR

Las inyecciones intraoculares permiten administrar fármacos en el interior del globo ocular. Se tratan de intervenciones mínimamente invasivas y poco dolorosas para el paciente que se utilizan para tratar distintas enfermedades de la visión, principalmente la degeneración macular asociada a la edad, endoftalmitis y problemas vasculares de la retina, entre otras. Las inyecciones intraoculares pueden administrarse en la cavidad vítrea donde se encuentra el humor vítreo (intravítrea) o en la cámara anterior del ojo (intracameral).

En oftalmología se utilizan también, los implantes de liberación prolongada de fármacos. Se administran mediante la utilización de un aplicador en la cavidad vítrea del ojo afectado. Por citar algún ejemplo, es habitual la utilización de implantes de liberación prolongada de dexametasona (Ozurdex*) en el edema macular.