FARMACIA AMBULATORIA Y NUEVAS TECNOLOGÍAS
3. EL FUTURO DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS
Como comentamos al inicio del tema, las TIC son dinámicas, lo que hoy se considera una nueva tecnología en 10 años seguramente no sea así o directamente ni exista. Es por ello que debemos mirar hacia el futuro de las nuevas tecnologías para estar preparados. Las tres grandes tendencias que se están empezando a utilizar en nuestro campo son la creación de comunidades, la telemedicina o telefarmacia, la interconectividad y la gamificación.
La creación de comunidades de pacientes no es algo nuevo. Tenemos la web ya comentada de PatientsLikeMe que agrupa a pacientes con la misma enfermedad para fomentar el apoyo y transmisión de la comunicación entre ellos. La novedad está en la incorporación de los profesionales sanitarios a estas redes. Así, un médico o un farmacéutico tiene a sus pacientes conectados con los que puede interactuar en cualquier momento.
La telemedicina o la telefarmacia tampoco es algo novedoso. Cada vez más se utilizan las consultas telefónicas en nuestro medio como alternativa a la presencial para realizar entrevistas, comunicar resultados o preguntar por la tolerancia al tratamiento. La mejora de los sistemas informáticos en los hospitales, así como la garantía de confidencialidad y privacidad en las conexiones, pueden suponer un auge de las videollamadas entre profesionales sanitarios y pacientes en los próximos años.
La tercera futura tecnología es la interconectividad. Ahora mismo se dispone de mucha información sobre la salud de una persona que proviene de diferente fuentes. Tenemos las analíticas, las notas de evolución clínica, los registros de adherencia, pero también tenemos su actividad física que recoge en una app, las calorías que consume de su lista de la compra, las horas de sueño que se recoge cuando se pone el despertador. Toda esta información que cada persona recoge sobre sus hábitos de vida puede ser de mucha utilidad para los profesionales sanitarios, por lo que el siguiente paso puede ser integrarlos en las historias clínicas electrónicas.
Por último, la gamificación se podría definir como la utilización de mecánicas de juego en entornos y aplicaciones no lúdicas con el fin de potenciar la motivación, la concentración, el esfuerzo, la fidelización y otros valores positivos comunes a todos los juegos. En otras palabras, la gamificación pretende persuadir a los usuarios para que realicen una actividad como si fuera un reto atractivo. Es importante diferenciar juego de gamificación, el primero es un fin en sí mismo mientras que el segundo es un medio para lograr un objetivo.
La gamificación se empezó a utilizar en grandes empresas como una manera de motivar e incentivar a los empleados mediante retos y dinámicas de juego. Actualmente, podemos ver muchos ejemplos en el mundo de la publicidad o de la docencia. Desde hace unos años, la gamificación también está encontrando su hueco en el mundo de la sanidad a través de apps móviles. Podemos destacar algunas en concreto:
- TriviFarma: versión móvil del Trivial pero para profesionales sanitarios que quieren repasar la farmacología mientras se divierten.
- GoalPost: juego de doce semanas de duración para dejar de fumar de una forma muy divertida. La app te lanza pequeños retos con los que ganar puntos y subir niveles. Además, permite compartir tu avance en redes sociales para poder recibir el apoyo de amigos y motivarte en los momentos más complicados.
- MangoHealth: una app que sirve como recordatorio de toma de medicamentos pero que además premia a los más cumplidores dando puntos que servirán para subir niveles y desbloquear nuevas funciones.
- SuperBetter: sirve para aquellas personas que tienen un objetivo muy claro y complicado como cumplir con un tratamiento y les cuesta llevarlo a cabo. La app mediante retos y mensajes te permite estar motivado y ser optimista.
- Bant: app para pacientes con diabetes que permite llevar el control de las ingestas diarias, calcular dosis de insulina y compartir experiencias con otros pacientes en tu misma situación. Además, si mantienes un buen control de la enfermedad la app te va premiando.
En definitiva, las TIC son herramientas de uso habitual en el entorno sanitario. El técnico de farmacia, junto con el farmacéutico, debe ser capaz de identificar y recomendar las más adecuadas para cada paciente.